En un mundo espiritual donde se considera que la energía negativa puede afectar el bienestar y el equilibrio, la búsqueda de métodos efectivos para limpiar las malas vibraciones ha llevado a la exploración de diversas prácticas.
Una de las técnicas más destacadas y accesibles es el uso del limón en un poderoso ritual de limpieza energética. Con fines espirituales, tiene raíces en diversas culturas a lo largo de la historia. Desde las antiguas civilizaciones hasta prácticas contemporáneas.
De hecho, de acuerdo con el feng shui, antiguo sistema filosófico chino de origen taoísta basado en la ocupación consciente y armónica del espacio, los limones no deben ser tirados a la basura. Esto, ya que pueden funcionar muy bien a la hora de limpiar las malas energías que se encuentran en todas partes y pueden llegar al hogar con las visitas.
A raíz de esto, dice el feng shui, es el mejor aliado para protegerse en cualquier espacio de las vibraciones negativas o pesadas de personas que podrían estar siempre en el entorno.
Se cree que esta fruta cítrica es un eficaz medio para despejar los caminos financieros, especial para quienes buscan reinventarse e iniciar nuevos proyectos con el objetivo de alcanzar el éxito; así mismo, transformar las energías circundantes en positivas, convirtiéndose en un purificador de espacios que, por su color verde, se asocia con la atracción de dinero mientras, al tiempo que evade los obstáculos económicos del ambiente.
¿Cómo hacer este ritual con limón?
Ingredientes
- Un plato blanco o de color claro, que sea usado solo para hacer rituales y no los que generalmente se usan para la comida.
Paso a paso
- Para iniciar, es importante intencionar lo que se busca, con frases como “revoco cualquier mal que venga hacia mí” o “las energías de mi hogar están limpias”, son algunas opciones.
- Limpiar el plato con el humo de los sahumerios de salvia.
- Crear un círculo de sal dentro del plato.
- Cortar el limón a la mitad y ponerlo dentro del círculo de sal.
- Ubicar los clavos de olor en el centro del limón.
- Colocar el plato en un lugar donde la energía se sienta sobrecargada y dejar reposar ahí durante 9 días.
- Luego de ese tiempo, revisar el estado del limón. Si la fruta está ennegrecida significa que antes de iniciar el ritual había bastante energía negativa.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de SEMANA.