A pesar de utilizar detergentes de calidad y programas de lavado avanzados, muchos se sorprenden al descubrir que sus prendas aún desprenden olores desagradables. Esto se debe a una serie de factores que no permiten un lavado adecuado de la ropa.

Problemas en la lavadora

Expertos en electrodomésticos señalan que una de las principales razones detrás de este enigma radica en problemas internos de la lavadora. La acumulación de moho y bacterias en los compartimentos de detergente, las gomas de sellado y las áreas de difícil acceso puede ser el caldo de cultivo perfecto para los malos olores. Un mantenimiento regular, que incluya la limpieza de estos componentes, puede ser la clave para evitar este inconveniente.

Es recomendable limpiar la lavadora periódicamente para evitar la acumulación de residuos y formación de bacterias. (Imagen de referencia) | Foto: Getty Images

El hábito de dejar la popa en la lavadora

Otro factor que contribuye al mal olor postlavado es la costumbre de dejar la ropa húmeda en la lavadora por períodos prolongados. La humedad atrapada en la máquina proporciona un ambiente propicio para el desarrollo de olores desagradables. Por eso, se aconseja retirar la ropa inmediatamente después de que finalice el ciclo de lavado para evitar este problema.

Uso excesivo de detergente y suavizante

Aunque pueda parecer paradójico, el uso excesivo de detergente y suavizante puede contribuir al mal olor en la ropa. Los residuos de estos productos pueden acumularse en la lavadora y en las propias prendas, creando un ambiente propicio para la proliferación de bacterias y moho. Ajustar la cantidad de productos utilizados y realizar enjuagues adicionales puede ayudar a contrarrestar este problema.

Es importante no usar demasiado detergente, ya que puede acumularse y tener el efecto contrario en la ropa. (Imagen de referencia) | Foto: Getty Images

Consejos para evitar el mal olor en la ropa

Para evitar que la ropa huela mal después del lavado, es importante seguir estos consejos:

  • Realice una limpieza regular de la lavadora: utilice un programa de limpieza específico o, si no tiene uno, ponga en marcha un ciclo de lavado a alta temperatura con vinagre blanco.
  • Use la cantidad adecuada de detergente: siga las instrucciones del fabricante del detergente.
  • Seque la ropa al aire libre o en una secadora con ventilación: No cuelgue la ropa muy junta, deje espacio para que circule el aire y se seque bien.
Colgar la ropa muy junta o acumularla puede hacer que los malos olores perduren. (Imagen de referencia) | Foto: ©Burak Karademir

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.