Lavar la ropa puede ser una tarea rutinaria, pero conocer qué colores se pueden lavar con blanco en la lavadora es esencial para mantener la ropa en buen estado y evitar posibles problemas de decoloración. Existen cuidados específicos, los cuales brindan mayor seguridad al momento se asear estos objetos personales.

Las prendas blancas son una elección popular en muchos armarios, ya que es versátil y clásica. Sin embargo, al limpiarla, es crucial tener en cuenta la posibilidad de que los colores de otras prendas se transfieran a la ropa blanca.

Lavar ropa con mucha atención y cuidado para no dañarla. | Foto: Getty Images

Primero, es importante entender que la clasificación de las prendas en blancos y colores no siempre es suficiente. La ropa de colores puede variar ampliamente, y algunos tonos tienden a desprender más tinte que otros durante el lavado. Por lo tanto, es útil clasificar aún más las prendas de colores en claros y oscuros.

Las prendas de colores claros generalmente incluyen tonos pastel y colores suaves. Estos son menos propensos a desprender grandes cantidades de tinte durante el lavado, por lo que se pueden lavar de manera segura con ropa blanca. Algunos ejemplos de colores claros que se pueden lavar con blanco son el rosa claro, el amarillo pálido, el celeste y el beige.

La humedad produce moho en la ropa blanca. | Foto: Yuki Kondo

Sin embargo, es fundamental tener precaución con los colores oscuros. Estos tonos intensos tienen más probabilidades de desprender tinte durante el lavado, lo que puede afectar negativamente a la ropa blanca. Por lo tanto, es aconsejable separar las prendas de colores oscuros de las claras.

Ejemplos de colores oscuros que deben lavarse por separado son el negro, el azul marino, el morado oscuro y el verde profundo.

Otra consideración importante es la resistencia del color. Algunas prendas tienen tintes que son más propensos a desprenderse incluso si son de colores claros. En estos casos, es preferible lavar esas piezas por separado o con las similares para evitar manchas no deseadas en la ropa blanca.

El tipo de tela también juega un papel crucial en la decisión de qué colores se pueden lavar con blanco. Telas como el algodón tienden a absorber y retener más colorante, mientras que las telas sintéticas pueden liberar menos tinte durante el lavado. Por su parte, las de algodón blanco, por ejemplo, pueden lavarse de manera más segura con otras de algodón de colores claros.

Además, es esencial revisar las etiquetas de cuidado de las prendas. Las instrucciones de lavado en las etiquetas proporcionan información específica sobre cómo cuidar mejor cada objeto. Algunas piezas pueden requerir lavado a mano o lavado en agua fría para preservar el color y la calidad de la tela. Seguir estas recomendaciones puede prolongar la vida útil de la ropa y prevenir problemas de decoloración.

En términos de consejos prácticos, es recomendable realizar una prueba de solidez del color antes de lavar un ejemplar por primera vez. Esto se puede hacer humedeciendo un pequeño trozo de la prenda y presionándolo contra un paño blanco. Si observa que el color se transfiere al paño blanco, es posible que la prenda desprenda tinte durante el lavado, y se debe lavar por separado.

Además, el uso de productos específicos para la protección del color, como detergentes diseñados para color o paños capturadores de tintes, puede ser beneficioso. Estos productos están formulados para atrapar los tintes liberados durante el lavado, evitando que se adhieran a otras prendas, incluida la ropa blanca.

Separar la ropa en blancos, colores claros y oscuros puede ayudar a prevenir problemas de decoloración y mantener la ropa en óptimas condiciones. Con precaución y atención a estos detalles, puede disfrutar de la ropa blanca sin preocupaciones de manchas no deseadas.

Cuidados al lavar la ropa. | Foto: Getty Images

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.