La sábila, también conocida como aloe vera, es una planta medicinal, que se puede cultivar tanto en espacios interiores como en exteriores. Se trata de una planta muy similar al cactus, fácil de cuidar y resistente. Históricamente, es una mata que se ha utilizado para tratar afecciones cutáneas y problemas digestivos, pero también se dice que es buena para el crecimiento del cabello.
Actualmente, el gel de sus hojas se utiliza en cosméticos y productos de cuidado personal como cremas hidratantes, jabones o cremas, precisa el portal El Mueble.
Dentro de los beneficios medicinales que se le atribuyen están, entre otros, los siguientes.
- Favorece la cicatrización de heridas y quemaduras. El gel contiene propiedades antisépticas, lo que ayuda a que la cicatrización de las heridas sea más rápida.
- Calma e hidrata la piel. El extracto de aloe vera ayuda a regenerar la piel rápidamente gracias a su poder hidratante.
- Propiedades antioxidantes. Contiene una gran cantidad de polifenoles, un tipo de sustancia con efecto antioxidante, por lo que ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro de la piel.
- Regenera la piel tras la exposición solar. El gel es bueno para pieles resecas o dañadas debido a una excesiva exposición solar.
Se trata de una planta que no florece con frecuencia, pero hay trucos que permiten el logro de este objetivo. Uno de ellos es el uso de la propia planta. En sus hojas carnosas esta planta alberga muchos nutrientes esenciales para las plantas como es el caso del nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, magnesio y zinc. Se dice que estos elementos son la base para un crecimiento saludable y una floración abundante. Además, el aloe vera aporta vitaminas y aminoácidos que actúan como bioestimulantes.
Por esta razón es posible recurrir a un remedio casero que faciltará que esta mata, independiente de que esté en el jardín o en interiores, florezca. Para ello se requiere de lo siguiente:
Ingredientes:
- Dos hojas de aloe vera madura
- Un litro de agua
- Un recipiente con tapa
Preparación:
- Se eligen dos hojas de aloe vera de una planta madura, cortándolas lo más cerca posible del tallo.
- Se lavan las hojas con agua limpia para eliminar cualquier residuo de tierra o polvo.
- Se colocan las hojas en el recipiente con agua luego de macerarlas y se dejan reposar durante 24 horas en un lugar oscuro y fresco.
- Pasado ese tiempo se retiran las hojas y se licúa el líquido hasta obtener una mezcla homogénea.
- Se diluye esta mezcla en agua.
¿Cómo usar este remedio casero?
- Se rocía la mezcla sobre las hojas de la planta.
- Se aplica el abono cada dos o tres semanas durante la primavera y el verano, época de floración del aloe vera.
Se dice que este abono natural estimula la producción de flores en el aloe vera, hace más resistentes las plantas a las plagas y enfermedades, a la vez que mejora la calidad del suelo, aportando nutrientes esenciales y es un producto natural que no genera afectaciones al medio ambiente.