Las polillas son insectos que causan daños a las prendas de vestir. Suelen colarse en los armarios o closet y comer de algunos tejidos generando, en ocasiones, que la ropa quede inservible. Prefieren las prendas elaboradas en lana, seda u otras fibras naturales.
Estos animales no hacen presencia en los hogares por falta de limpieza o de higiene, sino que hay algo que las atrae: la luz. Otras veces es posible que se peguen a la ropa que por alguna razón estuvo en la calle y regresó a casa.
Se dice que las polillas amantes de la ropa y que causan daños en la misma son particularmente de dos especies: la Tineola bisselliella (polilla de la ropa común) y la Tinea pellionella (polilla de los roperos).
Dado que se trata de bichos que generan afectaciones en las viviendas, lo ideal es prevenir que se expandan e incluso que ingresen a las mismas y para ello existen algunos trucos caseros de los que se puede hacer uso. Uno de ellos es la lavanda.
Los aceites esenciales de esta planta repelen a las polillas, debido a su olor intenso. Así las cosas, solo se pueden poner unas gotas de lavanda en agua caliente y limpiar con él los armarios y cajones. Otra opción es hacer bolsitas de lavanda seca y ponerlas en el cesto de la ropa limpia, según indica el portal El Mueble.
Otras opciones
Por su parte, la revista Architectural Digest indica que el laurel es otra de las opciones efectivas. Para ahuyentar a estos insectos lo único que se debe hacer es colocar sus hojas o sus ramas dentro de los roperos, armarios y cajones. De igual forma, es aconsejable ubicarlas en otras partes de la casa para que el olor se expanda en diferentes espacios y, de esta forma, alejar no solo a las polillas, sino a otros animales.
Una alternativa más es utilizar aceite de cedro en una botella de spray diluida en agua y aplicar este producto en el closet para deshacerse de estos animales. También es viable poner un pequeño recipiente con este aceite dentro de cada estante. En este caso se debe tener mucho cuidado para evitar que la ropa se manche.
Para aprovechar los beneficios del cedro, una alternativa más es meter pequeños trozos de su corteza entre la ropa, pues sus feromonas repelen a las polillas.
Por último, los clavos de olor también resultan de utilidad, debido a que su olor resulta muy desagradable para los insectos. En este caso se pueden envolver unos cuantos clavos en un paño y colocarlos en el armario para que estos animales, amigos de la ropa, no vuelvan a aparecer.