La lavanda es una de las muchas plantas a las que se le otorgan propiedades medicinales, además de ser una buena alternativa para tener en los jardines. A esta mata se le atribuyen bondades relajantes y por ello se utiliza en diferentes ámbitos.
Puede tenerse en espacios interiores o exteriores. Cuando está dentro de la casa suele usarse para decorar gracias a que su tonalidad lila, además de transmitir calma, también sirve para aromatizar cualquier espacio. Asimismo, suele utilizarse para repeler polillas.
En gastronomía se utilizan ciertos tipos de lavanda como la inglesa, lavandín y latifolia, las cuales tienen un aroma dulce y su sabor es levemente amargo con toques de limón, utilizados para elaborar postres.
El portal Cuerpo & Mente indica que, además de sus propiedades sedantes, esta planta es antiespasmódica y ligeramente analgésica, así como digestiva y carminativa, por lo que ayuda a abrir el apetito, facilita la digestión y previene la aparición de gases y flatulencias.
De otro lado, se le atribuyen bondades antiinflamatorias y antisépticas y por ello se indica en casos de inflamación o infección de las vías urinarias, como cistitis o uretritis, y para estimular la orina. Se toma en infusión, generalmente combinada con otras plantas diuréticas.
Lavanda y la buena energía
Pero adicionalmente se le otorgan beneficios energéticos, por lo que tenerla en el hogar puede resultar beneficioso. Según la técnica milenaria del feng shui, esta es una de las mejores matas para tener en la vivienda.
Aportes energéticos
De acuerdo con la revista Architectural Digest, esta técnica china asocia a la lavanda con pureza y también es una buena opción para combatir los efectos del estrés y favorecer la relajación. Lo recomendable es ponerla cerca de una ventana o colocarla en la habitación para que su aroma ayude a conciliar el sueño, sin olvidar ponerla hacia el Este.
Pero si se trata de atraer dinero y prosperidad, alejando las malas energías, lo ideal es ponerla en la puerta principal de ingreso a la casa. Allí puede absorber el sol, el agua y la mala energía propiciando la atracción de dinero y prosperidad.
El portal Panorama indica que otro lugar en el que puede ponerse es por detrás de la puerta principal y si no es viable por espacio o distribución, es posible acomodarla a un costado; de esta manera se dice que la buena suerte comienza a fluir y mejora el ambiente en casa.
Cuidados con esta planta
Cuando está en exteriores, lo mejor es colocarla en el lugar que más sol reciba durante el día, pues sus necesidades de luz son altas y lo ideal es que esté expuesta al menos seis horas al sol directo. Si está dentro de la vivienda se debe elegir un sitio que reciba más luz del exterior durante el día.
En cuanto a la tierra, lo recomendable es que esta tenga un buen drenaje y no acumule exceso de agua que puede echar a perder la raíz. Se deben evitar los suelos arcillosos y elegir las superficies arenosas para una mejor filtración del agua que elimine la concentración de humedad. Respecto al pH de la tierra, lo ideal para una lavanda es que se trate de una mezcla alcalina.
Por último, en relación con el riego, los aconsejable es ponerle agua una vez a la semana durante primavera y verano, mientras que en otoño e invierno basta con hacerlo una vez cada quince días. Lo mejor es prestar atención a su apariencia para saber cuándo le hace falta agua: si está decaída, entonces necesita riego, por ejemplo.