No mantener una buena higiene en el hogar puede desatar diferentes problemáticas, muchas de las cuales pueden ser graves para quienes habitan en el hogar. Cuando no se realiza una buena limpieza y se dejan varios residuos humanos, uno de los efectos más comunes es la aparición de las ratas o ratones, algo que se puede convertir en todo un dolor de cabeza.
Por lo general, estos animales se encuentran en zonas urbanas, especialmente en zonas donde hay residuos de excremento y orina. No obstante, en muchas ocasiones suelen vivir al interior de las viviendas, donde se acumulan poco a poco.
Existen varias señales que se deben tener en cuenta y que alertan sobre una posible presencia de estos roedores en una casa, dentro de estas se encuentran las características mordeduras que dejan con sus dientes cuando perforan o manipulan algún alimento. Asimismo, otra de las señales evidentes son las manchas de grasa que dejan, esto debido a que su pelaje expulsa esta sustancia que, al entrar en contacto con cualquier superficie, deja evidencia.
Otro de los signos más evidentes y preocupantes es la presencia de olores almizclados y picantes, los cuales se generan debido a los residuos de excrementos y orina que dejan por todas partes. Sobre esta última, es importante destacar que es una de las principales formas en la que las personas pueden adquirir diferentes enfermedades, algunas de suma gravedad para la salud.
La orina de la rata y su peligro
De acuerdo con el portal ‘Rentokil’, estos animales suelen dejar la orina a su paso para trazar una especie de ‘camino’ que es seguido por su plaga hasta la fuente de alimento encontrada. Sumado a esto, poco a poco se va creando lo que se conoce como pilares de orina, que hace referencia a la mezcla de este líquido natural con la suciedad que persiste en una zona específica, aumentando su peligrosidad.
La orina de las ratas o ratones pueden generar que una persona contraiga enfermedades como la salmonela, la leptospirosis, la enfermedad de Weil o el hantavirus, entre otras. De esta forma, queda claro que esta es una importante fuente de infección, por lo que también es fundamental conocer de qué forma se pueden contraer estas afecciones.
Contacto directo: expertos recomiendan nunca tocar la orina de los roedores o cualquier otra zona que haya podio entrar en contacto con esto, por lo que lo mejor será desinfectar este lugar lo más pronto posible, ya que de esta forma se eliminarán todos los riesgos.
Alimentos contaminados: por lo general, las ratas suelen contaminar los alimentos o incluso el agua con su orina. En ese sentido, es importante prevenir cualquier consumo de algún producto en el que se evidencie que estos animales lo tocaron.
Aire contaminado: otra forma de infección es inhalando el polvo o la suciedad que previamente ha sido contaminada con la orina del roedor, de ahí la importancia de desinfectar todos los lugares.
Herida abierta: Cuando se tiene algún rasguño o herida que todavía no ha cicatrizado de la manera correcta, es indispensable tener mucho cuidado y evitar que la zona entre en contacto con la orina, ya que esto puede ser de suma gravedad para la salud.
Además de la orina, es importante mencionar que las heces de los roedores también son una fuente principal de infección, por lo que también es indispensable evitar entrar en contacto con estas.
Teniendo en cuenta lo anterior, la mejor forma de evitar cualquier afección como consecuencia de las ratas, es evitando la presencia de estas en el hogar, para lo cual es indispensable mantener una buena higiene, especialmente en la cocina, ya que es la zona preferida por estos animales.