El cuidado de los electrodomésticos es de las recomendaciones que los fabricadores más hacen, pues, desde el momento en el que una persona adquiere algunos de estos artefactos, son responsables de que la utilidad, fuera de errores técnicos, perdure por años.
Con el paso del tiempo, las estufas fueron cambiando hasta el punto en el que hoy en día no solo existen las que se deben conectar con una pipeta de gas para funcionar, sino que muchos de estos artefactos de cocina, que ahora tienen incorporados hornos, se conectan a la luz, entre otras alternativas.
Precisamente, entre los más nuevos, la estufa eléctrica toma el protagonismo. De acuerdo con el escenario digital Hot fire door, las estufas eléctricas se diferencian de las de gas porque, en primera medida, las prefieren debido a que dicen que ‘son más baratas’, pero, de todas formas, hay que invertir para tenerlas en el hogar.
Sin embargo, como su nombre lo indica, estas estufas demandan de energía eléctrica, lo que quiere decir que incrementa el consumo de este recurso. Al igual que las de gas, las estufas eléctricas se calientan de inmediato, aunque la diferencia radica en que el calor se emite por radiación y es más rápido. “Las estufas que funcionan por electricidad, al no tener una llama, no corren el peligro de apagarse por una corriente de aire”, agregan.
Igualmente, al momento en el que se desea elegir una estufa eléctrica se generan interrogantes de diferente tipo. Muchos de los consumidores o compradores se cuestionan cómo limpiar este electrodoméstico para no dañarlo. Asimismo, qué productos de limpieza se pueden utilizar.
Limpieza de la estufa eléctrica
El funcionamiento de las estufas eléctricas puede verse truncado porque no son limpiadas de forma correcta. En ese sentido, aunque no existe un método estándar como tal, sí hay recomendaciones que se pueden considerar a la hora de asear una estufa.
En ese orden de ideas, AD Magazine dice que, en la mayoría de casos, las estufas eléctricas son de superficie lisa, lo que implica prestarles atención al momento de limpiarlas.
Así las cosas, nace la idea de la ‘sabiduría de la limpieza’, que consiste en usar jabón para platos líquido, agua tibia y una esponja que no raye, es decir, una espuma delicada.
Para Amelia Hensley, experta en limpieza de GE Appliances, hay momentos en los que se debe limpiar lo más rápido posible una estufa eléctrica, uno de ellos es cuando se derrama comida en la superficie. Debido a que estas estufas se calientan en tiempo récord, se corre el riesgo de que los restos alimenticios se queden pegados y cuando se espera, al momento de limpiar, puede que se raspe la superficie.
Por lo tanto, tan pronto se derrama algún alimento, se recomienda apagar el fogón eléctrico y proceder a limpiar los residuos con un trapo grueso, pues la temperatura puede ser demasiado elevada.
Ventajas de tener una estufa eléctrica
De acuerdo con recopilaciones de Home solution, la calefacción de las estufas de tipo eléctrico cuentan con varias ventajas, en comparación con las que emiten otro tipo de calor. Dichos aportes son:
- Son más eficientes porque calientan los alimentos rápidamente.
- Son fáciles de transportar debido a que tienen un considerable tamaño para mover de un lado al otro.
- La instalación es relativamente sencilla, pues lo que primordialmente se necesita es tener una toma de corriente eléctrica.
- En materia de seguridad, los expertos en soluciones del hogar dicen que hay estufas eléctricas, las cuales “poseen sistemas de seguridad que las apagan ante golpes”.
- Finalmente, un plus de estos artefactos es que son silenciosos y a muchos les agrada esto.