La canela es una de las especias más usadas en los hogares. Se trata de un condimento que destaca por su sabor dulce, el cual le da un toque especial a las distintas preparaciones gastronómicas.
Según la Fundación Española de Nutrición, este producto destaca por su aporte de nutrientes dentro de los que destacan minerales como el calcio, hierro, zinc, selenio y potasio, además de vitaminas A, B6 y C, fibra y carbohidratos.
Adicionalmente, se dice que es fuente de cumarinas, taninos y mucílagos, compuestos que le otorgan propiedades especiales. Por ejemplo, es antioxidante, gracias a su alto contenido de flavonoides, como las catequinas, que ayudan a eliminar el efecto de los radicales libres.
Pero adicionalmente, esta especia brinda otra serie de beneficios en las viviendas. Por un lado, se le relaciona con cosas positivas y según la filosofía china del Feng Shui, es un potente activador de la riqueza y el éxito; pero también su olor es muy usado para ahuyentar diferentes tipos de animales, como es el caso de las cucarachas y los mosquitos.
De acuerdo con el portal Gastrolab, al colocar canela en la casa se logrará que estos y otros insectos no se acerquen más, pues su olor es capaz de repelerlos. Se debe tener suficiente canela en polvo y para ello es viable moler un par de varitas de esta especia y pulverizarlas. Se coloca un ligero camino de este polvo por las zonas o superficies en donde suelen rondar estos insectos y lo ideal es dejarlo ahí un par de días.
Una de las recomendaciones es colocar cerca de la estufa, muebles de la cocina y perímetros clave donde rondan y pasados unos tres o cinco días, se cambia el polvo y se coloca un nuevo camino para mantener estos animales muy lejos de la vivienda.
Con papel higiénico
Otro de los trucos caseros es con papel higiénico. Según el portal Panorama, para ello solo se requiere de lo siguiente.
- Papel higiénico
- Dos cucharadas de canela
- 1 y ½ cucharadas de pasta de dientes
- Cinco hojas de laurel
Se cortan cinco cuadros de papel higiénico y se doblan por la mitad hacia lo largo, se retuerce el papel para que quede con la forma de un pabilo. Posteriormente, en un recipiente pequeño se agrega la canela y la pasta dental y con ayuda de una cuchara se integran los ingredientes hasta formar una pasta.
Esta mezcla se pone en el papel higiénico y en un vaso de vidrio se colocan las hojas de laurel y se introduce el papel untado con el producto. Lo aconsejable es que una parte del papel quede por fuera del vaso. Con precaución se enciende la punta del papel que quedó por fuera y se permite que el ambiente se impregne del humo que se genera del mismo.
El aroma que se origina del papel quemado en conjunto con la esencia que desprenderán las hojas de laurel actuarán como un buen repelente casero que mantendrá fuera del hogar tanto a las cucarachas como a los mosquitos.