La caída del cabello es un padecimiento que afecta a millones de personas. Según el instituto Mayo Clinic es una afección que puede darse de manera temporal o permanente y ser el resultado de cambios hormonales, afecciones médicas o consecuencia normal del proceso de envejecimiento.
Si en muchas ocasiones es algo natural, ya que forma parte de su proceso de crecimiento y es necesario que se caiga para que otro nuevo lo sustituya, cuando esa regeneración no se da al ritmo debido, es posible que se presente alopecia, una enfermedad que lleva a que los afectados pierdan el cabello de forma parcial o total. Cualquier individuo puede estar expuesto a perder el pelo, pero es algo que se presenta con mayor frecuencia en los hombres.
Hay investigaciones que indican que la pérdida de pelo puede darse cuando la persona tiene altos niveles de estrés, padece una enfermedad prolongada, consume fármacos, presenta enfermedades como el lupus, tiene un desorden tiroideo o deficiencia de algunos minerales y vitaminas.
Hierbas medicinales
Para hacerle frente a esta problemática hay diversos tratamientos médicos, pero también es posible recurrir a productos naturales que pueden contribuir en el propósito de evitarla o hacerle frente. Para ello es viable hacer uso de tres plantas.
Se trata del romero, la cola de caballo y la ortiga. Al romero, por ejemplo, se le atribuyen propiedades saludables para fortificar el cabello frágil y ayudar a que crezca más denso y sano. También se considera un estimulante capilar que, además de mejorar la textura del cabello, aporta brillo, suavidad y volumen a los cabellos que se encuentran maltratados y sin vida.
Para aprovechar los beneficios de esta planta se debe preparar una infusión con la misma y aplicarla en el cuero cabelludo cada vez que se lave, después de usar y enjuagar el champú habitual. Se aplica el producto natural y se masajea durante dos minutos, se cepilla el cabello suavemente y se deja que se seque al aire libre. Lo ideal es repetir el proceso durante dos semanas.
Beneficios de la cola de caballo
Por otro lado, la cola de caballo también es válida con el mismo fin. Esta hierba contiene silicio, uno de los nutrientes cuyo déficit provoca la caída del pelo, la pérdida de volumen y de densidad. También tiene selenio, el cual se asocia a la estabilización del yodo, encargado de fomentar el crecimiento capilar.
En este caso también se puede preparar una infusión utilizando tres cucharaditas de cola de caballo y una taza de agua; se deja hervir por un tiempo suficiente y luego se permite que repose y se cuela. Se aplica sobre el cabello seco y se deja que actúe; posteriormente, se enjuaga el cabello.
Por último, la ortiga. Esta planta posee múltiples propiedades antioxidantes, así como una cantidad importante de vitaminas (B1, D12, B5, C y D) y minerales tales como hierro, calcio, sílice, azufre, potasio y manganeso, que ayudan que el pelo se fortalezca.
La aplicación de este producto natural también puede hacerse con una infusión. Este remedio casero se utiliza para aplicarlo en el proceso de lavado del cabello. Se debe realizar el último enjuague con la infusión de ortiga verde, masajeando el cuero cabelludo durante unos minutos para que sus nutrientes penetren bien. Finalmente, se vuelve a enjugar el pelo.