Tan pronto como se conoció la propuesta del senador David Barguil, acerca de pedir a los bancos que hagan un mayor aporte en la coyuntura de una crisis sin precedentes, el gremio de bancos, Asobancaria, le salió al quite a la idea de que se deje de manera permanente la sobretasa en el impuesto de renta y que, además, no sea del 4 % (como está vigente), sino del 6 %.

El presidente del gremio, Hernando José Gómez, dijo que considera inconveniente la propuesta, pues dejarla permanente solo incrementaría los costos de operación del sector, lo que al final de cuentas terminaría sobre los hombros de los usuarios de servicios financieros.

Mientras que para Barguil el billón de pesos anual que se recaudaría con la medida se debería destinar a mejorar la infraestructura de los colegios y a invertir en vías terciarias, para Gómez el camino debe ser dejar que los bancos sigan otorgando créditos a las familias para comprar vivienda de interés social (VIS) y No VIS, y aprobando créditos a las pequeñas, micro y medianas empresas para que continúe la reactivación económica.

Para el dirigente de Asobancaria, los bancos ya aportan el 10 % del total del impuesto de renta que se paga en el país, mientras que solo participa en el 5 % del PIB.

Esta reacción es apenas el comienzo de la polémica que se generará alrededor de la reforma tributaria, en la que se metería la propuesta de Barguil.