La salida de Jorge Mario Eastman del gobierno ha producido un montón de cábalas sobre quien podría ser su reemplazo. Sin embargo, también ha generado muchos comentarios sobre el poder creciente que tiene María Paula Correa, la actual secretaria privada de la Presidencia, que ahora recibirá en encargo el puesto que deja Eastman. Esa misión es una de las más claves en la Casa de Nariño, y antiguamente se conocía como la persona que manejaba el famoso “computador de Palacio”. Correa es quizás la persona más cercana hoy al presidente. Fue quien lo acompañó durante toda su campaña y desde que llegó a Palacio de Nariño lo acompaña en todas sus reuniones y viajes. Antes de trabajar con Duque había sido cónsul de Colombia en Nueva York y directora senior de Estrategia de Concordia en esa misma ciudad. Por esa razón, su encargo ha caído muy bien en las toldas uribistas y entre los congresistas y ministros que ya tenían una relación fluida con ella.