En un país donde todo se atrasa, a todo el mundo le sorprendió que la adjudicación del Metro de Bogotá se diera cinco días antes de lo previsto. Siendo la obra de infraestructura más importante en la historia del país, a muchos incluso les generó sospecha. La explicación es la siguiente: en una junta directiva, el alcalde Enrique Peñalosa y los delegados del Gobierno Nacional le pidieron al gerente de la empresa Metro, Andrés Escobar, que hiciera todo lo posible para que dicha adjudicación se adelantara teniendo en cuenta la época electoral. Escobar hizo la tarea y le pidió apoyo a los bancos multilaterales que dieron su visto bueno para evitar cualquier retraso. Lo que se comenta es que el presidente del BID, Luis Alberto Moreno, ayudó en todo y fue clave para que la adjudicación se anticipara.