En la audiencia de Otto Bula se presentó una escena particular. La decisión finalmente favoreció al exsenador pues la jueza no aceptó su traslado a un establecimiento penitenciario. Sin embargo, sí regañó a Bula -procesado porque supuestamente le dio un apartamento al exfiscal Rodrigo Aldana- al indicar que la corrupción es un cáncer y que los regalos "ciegan los ojos de los sabios", como dice libro bíblico de Deuteronomio. El exsenador, al final de la diligencia, le pasó una estampita de Jesús como agradecimiento por la decisión. A lo jueza solo atinó a responder molesta: "soy agnóstica y estamos en un estado laico, señor".