La construcción del muro que prometió Donald Trump en campaña se empezó a materializar. Con la apertura de la licitación para el diseño de la estructura que se emplazará sobre la frontera entre Estados Unidos y México se conocieron algunas de sus características. Debe ser "físicamente imponente", con alturas que oscilarán entre 5,5 y los 9 metros. Su textura debe evitar que lo escalen y su diseño debe incluir estrategias que impidan que se excaven túneles debajo. Al gobierno de Trump no sólo le interesa que el muro impida el cruce irregular por la frontera, además quiere que sea bonito, agradable a la vista, y que sus colores combinen con el entorno, según informó The New York Times.