En medio de toda la polémica que se ha generado por el uso del Fondo Nacional del Ahorro (FNA) como una bolsa de empleo, en los pasillos del Congreso está circulando un concepto del abogado Julio César Ortiz Gutiérrez, en donde afirma que Gilberto Rondón no cometió delito alguno al entregar puestos a los recomendados del Partido Liberal.
En el documento, el abogado indica que los congresistas que pertenecen a la coalición de gobierno, pueden acceder a cargos públicos en ejercicio de los derechos políticos para contribuir a la gobernabilidad en la administración pública.
“Ahora bien, la consecuencia lógica de pertenecer a la coalición de gobierno es además de contribuir a la dinámica de la gestión legislativa en el Congreso de la República, la correspondiente participación en el mismo gobierno y en la Administración a través de las diferentes manifestaciones de ejercicio de los derechos políticos dentro de los que se encuentra el acceso al desempeño de funciones y cargos públicos”, dice el concepto.
Según Ortiz, también los funcionarios públicos pueden recibir hojas de vida de los congresistas, siempre y cuando no exista constreñimiento ni presión indebida. Indica que el funcionario público está en su derecho de conceder escenarios laborales a personas sugeridas, referenciadas o recomendadas por algún congresista, siempre que cumplan los requisitos legales. “Eso no es ningún delito”, reiteró Ortiz.
Recientemente, Gilberto Rondón, quien estaba al frente del FNA, dijo que él no se prestaría para cometer delito alguno al recibir recomendaciones o sugerencias, pues por su cargo está en capacidad de recibirlas siempre y cuando el aspirante cumpla estrictamente con los requisitos para acceder al cargo. Rondón ha estado en el ojo del huracán por recibir hojas de vida de congresistas del Partido Liberal.
Ortiz indicó que su concepto fue elaborado con base en jurisprudencia de la Corta Suprema de Justicia, por lo que reiteró que los legisladores liberales tampoco cometieron delito alguno.