La Alcaldía de Bogotá reportó que en los últimos días se logró el traslado de 110 indígenas emberá asentados en el Parque Nacional a la Unidad de Protección Integral (UPI) de la Florida, centro dispuesto por el Idipron, mientras definen el regreso a sus territorios ubicados en Risaralda y Chocó.
A pesar de este traslado, en el Parque Nacional aún continúan más de 1.600 personas, pero de ese total solo un poco más de 400 indígenas realmente pernoctan en el parque.
“La caracterización arrojó que en el Parque Nacional hay más de 1.800 personas. No obstante, sabemos con información de terreno que solamente 900 pertenecen a comunidades indígenas, y solo 400 personas son las que pernoctan diariamente en el lugar; el resto lo que hace es dormir en otro lado y pasar el día en el Parque Nacional”, aseguró el secretario de Gobierno, Felipe Jiménez.
El funcionario reveló que en estos momentos no hay ningún fallo que obligue al Distrito a acatar alguna decisión a favor de los indígenas, porque el juez de segunda instancia declaró la nulidad del proceso. A pesar de ello, la Administración Distrital, por ahora, no intervendrá el Parque Nacional.
Según lo explicó el secretario Jiménez, “los emberá presentes en el Parque Nacional no serán desalojados por las autoridades, porque el proceso “aún está vigente; seguiremos insistiendo con ellos en que este lugar no es apto para que lo habiten mujeres embarazadas y niños, y que Bogotá tiene refugios dignos para que puedan vivir allí dignamente”.
En la UPI de la Florida, actualmente, están alojados cerca de 370 emberás, mientras son trasladados a sus lugares de origen con todas las garantías de seguridad.
A la fecha, el trabajo conjunto del Gobierno nacional y del Distrito ha conseguido que 1.543 indígenas emberá hayan regresado a sus territorios en Chocó y Risaralda.
Desde 2020, la Alcaldía de Bogotá ha dispuesto más de 9.100 millones de pesos para la atención de esta comunidad en temas de salud, alimentación, educación y actividades para las mujeres y personas de la tercera edad.