En la bancada de la Alianza Verde en la Cámara de Representantes ya se comenta la posibilidad de intentar reducir a dos o tres la lista de nombres que se postularon a la presidencia de esa corporación porque saben que sería muy difícil, casi irrealizable, que logren ponerse de acuerdo con un solo nombre.
En la baraja están los representantes Katherine Miranda, Martha Alfonso, Jaime Raúl Salamanca, Wilmer Castellanos, Duvalier Sánchez y Santiago Osorio. En el partido, lejos de llegar a un acuerdo, durante cada una de las semanas que han pasado se comentan más nombres de nuevos opcionados.
El problema para los verdes es que saben que esa atomización puede jugarles en contra, como ya sucedió en la elección de la presidencia del Senado de julio de 2023, cuando fue el voto de la oposición el que terminó imponiendo a Iván Name en esa distinción.
El senador Name fue el elegido y no la senadora Angélica Lozano (quien siempre había sonado para el cargo) ni Inti Asprilla, quien también había manifestado su intención de llegar a ese puesto (y es cercano al Gobierno).
Entonces, los verdes exploran cómo reducir esa lista de postulados a la presidencia de la Cámara de seis aspirantes a un catálogo con solo dos o tres nombres y la ficha clave para aminorar esas candidaturas sería el representante Castellanos.
Tanto él como el representante Salamanca son de Boyacá (donde el líder político del partido es el gobernador Carlos Amaya) y son afines al presidente Gustavo Petro, pero en las reuniones se comenta que Castellanos podría conseguir más respaldo de la plenaria y también el del Gobierno.
Así las cosas, las aspiraciones de la representante Miranda y del representante Castellanos serían las que terminen presentándose ante la plenaria de la Cámara para que la presidencia se defina a voto limpio.