La imagen que acaparó todas las miradas en la crucial reunión entre el presidente de la República Gustavo Petro y el expresidente Álvaro Uribe por la polémica reforma a la salud del Gobierno del Pacto Histórico, fue un apretón de manos entre ambos.
El momento se dio cuando Petro entró a uno de los salones de la Casa de Nariño, donde empezó a saludar a cada uno de los asistentes, incluido el expresidente Uribe. Al llegar a él se realizó un cordial apretón de manos y un intento de abrazo.
Uribe hace varios días aceptó tomarse un tinto con el jefe de Estado para debatir los alcances de la reforma a la salud, la cual ha recibido agudas críticas de la oposición, especialmente del Centro Democrático.
Al momento de ingresar a la Casa de Nariño, el representante a la Cámara por el Centro Democrático, Andrés Forero, insistió en que la oposición está en contra de la reforma.
“Hemos recibido una invitación de parte del presidente de la República, nosotros somos respetuosos de la institucionalidad y básicamente venimos a exponerle las razones por las cuales nos oponemos a la reforma a la salud”, indicó.
A su turno, la senadora del Centro Democrático Paloma Valencia fue clara en indicar que no habrá acuerdos con el presidente Petro sobre la reforma a la salud, recalcando que el voto es en contra.
“No, nosotros no venimos aquí a hacer acuerdos con el presidente, vinimos a explicarle cuáles son las razones por las cuales el Centro Democrático insiste y considera que la reforma presentada es inconveniente para los colombianos. Destruir el sistema de salud significará que los colombianos, muchos, se queden sin servicio y que haya que pagar mucho más de lo que pagamos hoy para volver a tener los mismos servicios de salud que hoy tenemos”, dijo.