Desde el 26 hasta el 28 de enero, un grupo de políticos colombianos que hace parte del curso integral que dicta la Escuela Superior de Guerra, y que este año llegó a su versión 50, tuvo una de sus pruebas de fuego más grandes: vivir como soldados en la zona boscosa de Tolemaida, uno de los sitios de entrenamiento militar más grande del país. El tema: ‘inteligencia’ y la ‘estrategia táctica’.

SEMANA conoció que los políticos durmieron en camarotes, amanecieron entre la manigua y pasaron las necesidades al estilo ranger de las Fuerzas Militares.

Una de las personas que asistió puntualmente a la cita fue la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, quien pasó la prueba. Ella, como los demás, durmió en el monte y desayunó su ración de campaña.

Algunos de los integrantes al curso. Al fondo, la alcaldesa Claudia López. | Foto: NO

Lo mismo que su esposa, la senadora de la Alianza Verde, Angélica Lozano; y los congresistas del Centro Democrático, Juan Espinal; Heráclito Landinez, del Pacto Histórico y Gabriel Becerra, de la Unión Patriótica.

Al curso también asistió el secretario jurídico de la Presidencia, Vladimir Fernández, entre otros.

Allí el ambiente es de compañerismo, incluso, todos olvidan sus corrientes y diferencias políticas en el Congreso.

El taller se extenderá durante 11 meses, las clases son estrictas y los generales retirados que dirigen las clases tienen la última palabra. Ninguno de los alumnos puede utilizar su teléfono celular.