En la mañana de este viernes se reunieron el canciller Álvaro Leyva junto con su homólogo de Venezuela, Yvan Gil, en el Palacio San Carlos en Bogotá, sede de la Cancillería, desde donde anunciaron la instalación de la Comisión de Vecindad e Integración entre ambos países.
Según explicaron Leyva y Gil, el propósito de este acuerdo se enmarca en distintos frentes, como por ejemplo, en temas de infraestructura, migratorios, comunicaciones, sociales y energéticos. Además, pretenden que esa alianza se enfoque en las zonas fronterizas y en los departamentos que limitan ambos países.
Los cancilleres anunciaron que el acuerdo también pasa porque haya una cooperación en la búsqueda de personas dadas por desaparecidas colombianas que podrían estar en territorio venezolano.
“Lo que estamos haciendo hoy es aquello de regresar a la buena vecindad, a la integración, dejar atrás ese error, es algo que enaltece a ambas repúblicas”, aseguró Leyva.
El ministro de Relaciones Exteriores de Colombia dijo que el propósito de la alianza es recomponer una asociación entre ambos países. Fue enfático en que considera que nunca se debieron haber roto las relaciones.
Por su parte, el canciller de Venezuela afirmó que buscarán consolidar intercambios comerciales entre ambos países. “Hemos firmado una declaración donde la República Bolivariana de Venezuela prestará todo el trabajo y la cooperación sobre las personas presuntamente desaparecidas en la frontera, que sabemos, es un capítulo importante que debe ser resuelto a la brevedad”, aseguró el canciller venezolano.
En medio de todo ese panorama entre Colombia y Venezuela generó tensión la decisión de inhabilitar a la candidata presidencial venezolana María Corina Machado por 15 años.
El presidente Gustavo Petro se pronunció sobre esa decisión de la Contraloría de Venezuela. “Es claro que ninguna autoridad administrativa debe quitar derechos políticos a ningún ciudadano(a)”, afirmó.
Asimismo, la situación con el embajador de Colombia en Venezuela, Armando Benedetti, no ha sido sencilla. Recientemente, la cancillería de Leyva alargó su periodo como diplomático, pero posteriormente se suspendieron algunas de sus condiciones laborales, entre ellas su salario.
En medio de todo ese panorama, el propósito de instalar las oficinas consulares en ambos países sigue estando pendiente, aunque los cancilleres de Venezuela y Colombia aseguraron que siguen trabajando en ese propósito.