La semana entrante la Organización Ardila Lülle inaugurará en Sesquilé su nueva planta de cerveza, en sociedad con la chilena CCU y la holandesa Heineken. La planta arrancará con una producción de 3.200.000 hectolitros y una cerveza nacional que han elaborado en medio de gran secreto. En una etapa posterior producirán la marca Heineken. Tienen la meta de competir con el monopolio de Bavaria con miras a quedarse con el 15 por ciento del mercado. Los Ardila tienen experiencia en ese campo, pues fundaron la cerveza Leona hace un par de décadas.