El drama de violencia intrafamiliar que vivieron Johnny Depp y Amber Heard no solo es escabroso en materia de maltrato, sino que se tradujo en el desplome de la carrera y la fortuna del actor. Disney le canceló la nueva película de Piratas del Caribe, en la que le iban a pagar 22 millones de dólares. También se suspendió su participación en Animales fantásticos y la Warner dejó saber que no quiere volver a contratarlo. Netflix, por su parte, eliminó películas en las que él aparecía. Se dice que el actor busca puesto en producciones de bajo presupuesto y puso en venta sus propiedades. Si pierde en la Corte, deberá pagarle a ella 100 millones de dólares. Paradójicamente, solo le queda un puesto: ser la imagen del perfume Salvaje, de Dior. Hoy, solo en Instagram, Amber tiene 4,4 millones de seguidores, mientras Depp llega a 15,8 millones.