Para 2019, el gasto del Estado en pensiones, para atender alrededor de 2.200.000 colombianos, ascenderá a 57,2 billones de pesos, mientras que los aportes de los afiliados de Colpensiones serán del orden de 17, 8 billones de pesos. Es decir, que el déficit será de cerca de 40 billones de pesos anuales. Con un hueco de esa dimensión, no se entiende cómo el gobierno contempla hacer una reforma pensional que no aumente la edad de jubilación, que en la actualidad es de 57 años para las mujeres y de 62 años para los hombres, una de las edades más jóvenes del mundo. Según todas las proyecciones, a la vuelta de 10 o 15 años la expectativa de vida será de 100 años, lo que significa que el Estado tendría que hacerse cargo de esos jubilados por 30 o 40 años.