El Embajador de Estados Unidos en Colombia, Francisco Palmieri, publicó a través de la cuenta oficial de la embajada en Bogotá un mensaje de solidaridad y apoyo con Colombia frente a los actuales incendios forestales que han perjudicado diferentes lugares del país.

“Nos unimos al pueblo colombiano en lamentar la pérdida de flora, fauna y daños a la propiedad, y elogiamos los valientes esfuerzos de los bomberos colombianos y muchos otros para contener y extinguir estos incendios”, dice el mensaje firmado por el diplomático.

Palmieri confirmó que se comunicó con el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y confía plenamente en su trabajo para mitigar el problema de los incendios en la ciudad, “Le prometí nuestro apoyo. Mi equipo también se ha puesto en contacto con miembros del Gobierno nacional y les hemos expresado nuestra disposición a ayudar en todo el país”, dijo.

Debido a los incendios forestales que se han presentado en distintas partes de Colombia, el presidente Gustavo Petro anunció este miércoles 24 de enero que ordenó activar los protocolos de ayuda internacional.

El embajador Palmieri confirmó que entre los equipos aéreos que responden a los incendios forestales se encuentran los helicópteros ‘Guacamaya’ que la Sección de Asuntos Antinarcóticos y Aplicación de la Ley (INL por sus siglas en inglés) de la Embajada de EE. UU. donó a Colombia el año pasado para la protección del medio ambiente.

“También hemos donado equipo contra incendios y estamos dispuestos a donar más cuando sea necesario. También estamos trabajando con el Servicio Forestal de EE. UU. y USAID para ofrecer apoyos adicionales”, aseveró.

Colombia pidió ayuda a los países miembros de Naciones Unidas para extinguir una treintena de incendios forestales que azotan varias regiones y ahogan en el humo a la capital, Bogotá. “Vamos a pedir apoyo a las Naciones Unidas. Hay un protocolo para ello, en el día de hoy se activa”, anunció a los medios el presidente Gustavo Petro, quien ya había decretado el “desastre natural”.

Incendio forestal en los cerros orientales de Bogotá. | Foto: Guillermo Torres Reina