Integrantes del Gobierno nacional vienen alentando ataques contra la Registraduría Nacional del Estado Civil, pese a que en las elecciones nacionales de 2022 en las que resultó elegido Gustavo Petro como presidente fueron ellos mismos los que validaron la transparencia de esa entidad.

Las intimidaciones se han vuelto recurrentes. Sin ir muy lejos, el pasado domingo (10 de noviembre) Petro compartió una publicación hecha por la superintendente de Industria y Comercio, Cielo Rusinque, hablando de la supuesta función de vigilancia que podría tener ese despacho sobre la entidad.

“¿Por qué algunos sectores políticos y de la prensa, al lado de Barbosa, no quieren que la Superintendencia cumpla su función constitucional en la contratación de la Registraduría? Aquí se explica la función constitucional de la Superintendencia de Industria y Comercio”, dijo el mandatario.

Rusinque había compartido un video en el que hablaba sobre la intervención que hizo su oficina para investigar a funcionarios de la Registraduría, una medida que congresistas de diferentes sectores políticos calificaron como una leguleyada del despacho de esa funcionaria, quien ha sido una militante fiel del petrismo.

Pero el mismo Pacto Histórico ya ha dejado constancia de la transparencia de la Registraduría. “Aquí tenemos que aceptar que nos han dado garantías, nos han dejado nombrar un auditor para que esté presente en el escrutinio y sobre todo tenga acceso a los códigos fuente de la Registraduría, que era una petición”, dijo el ahora director del DPS, Gustavo Bolívar, en un video que se difundió para la campaña de 2022.

En ese mismo material audiovisual también aparece la congresista María José Pizarro y el embajador Roy Barreras habla de la generación de confianza en el software de la entidad. En el video que fue difundido antes de las elecciones presidenciales de ese año se aprecia el recorrido que realizó el entonces candidato Gustavo Petro en compañía de Verónica Alcocer a las instalaciones de la Registraduría.

Empero, ahora el Gobierno que fue elegido con las normas de funcionamiento actuales de la Registraduría siembra dudas sobre la entidad.