La familia de Álvaro Gómez le ha adjudicado la responsabilidad del crimen a una alianza del cartel del Norte del Valle con Ernesto Samper y su ministro Horacio Serpa. Pero en esa hipótesis también han aparecido muchos otros nombres, incluyendo el del general Naranjo. Sin embargo, este no puede ser el personaje al que se refiere la Fiscalía, pues en esa época era coronel. El expresidente Ernesto Samper tampoco, pues su juez natural es el Congreso. Como nunca se ha hablado de gobernadores, por eliminación solo quedaría el nombre del exministro Horacio Serpa. Con excepción de la familia Gómez, todos los conocedores de la realidad política colombiana consideran que la teoría de que Serpa participó en ese crimen no tiene pies ni cabeza. Por lo tanto, si el aforado es él, habrá indagación pero de ahí no pasará la cosa.