En su visita a España, la vicepresidenta Francia Márquez participó en el foro Tendencias, donde conversó con Pepa Bueno, directora del diario español El País, sobre su ascenso al poder, el programa de gobierno y el racismo, el cual también está presente dentro de la administración del presidente Gustavo Petro.
De acuerdo con la vicepresidenta, ha encontrado racismo dentro del entorno de poder en el que se desenvuelve.
“Claro que sí, sin dudas. Por ejemplo, ahora que soy vicepresidenta, no tendría que estar diciéndoles a los funcionarios públicos, incluyendo de nuestro propio Gobierno, ‘respétenme, soy la vicepresidenta’. Si fuera un hombre mestizo o blanco no tendría que decirlo. Ese respeto está intrínseco. A mí me toca decirlo todo el tiempo”, respondió la vicepresidenta colombiana.
Además, resaltó que esta dinámica es desgastante: “No soy una mujer que anda con vanidades de ‘ahora soy la vicepresidenta’, ni me interesa eso, pero tengo que estar diciendo que soy la vicepresidenta. No solo por mi condición de mujer, sino por mi condición de mujer afrodescendiente”.
También habló sobre expresiones de racismo más fuertes, como cuando la han comparado con animales: “La ultraderecha, artistas comparándome con simios. Es decir, un pensamiento colonial de deshumanizar y expropiar la condición humana de las personas afrodescendientes e indígenas para someterlas a un proceso de esclavitud. Todavía esa narrativa sigue estando sobre la mesa”.
Por esto, planteó educación para evitar las prácticas racistas en el país. “Esto lo vivo yo como vicepresidenta, pero lo viven los niños y las niñas indígenas y afrodescendientes todos los días en el país”.
Finalmente, invitó al Gobierno de España y a Europa a unir esfuerzos para combatir el racismo por medio de una “agenda conjunta de reparaciones históricas” para deconstruir las barreras sociales.