En plena contingencia aérea, en especial en las festividades de Semana Santa, cualquier alternativa ha sido válida, siempre y cuando ayude a los ciudadanos afectados por el cese de operaciones de las aerolíneas de bajo costo, Ultra Air y Viva Air. Una de estas ayudas ha provenido directamente desde el Gobierno, quien ha ofrecido vuelos en aviones de la Fuerza Aérea para ayudar a los pasajeros damnificados.
En horas de la mañana del 4 de abril, la Aeronáutica Civil indicó que 93 pasajeros con destino a Bogotá y Medellín desde el archipiélago de San Andrés, fueron trasladados solidariamente por un avión de la Fuerza Aérea. La población que se dirigió a la capital del país fueron 17 personas y el resto se desplazó para la ciudad antioqueña.
Sin duda alguna, en lo corrido del año ha ocurrido una de las peores situaciones en la historia reciente de la aviación en Colombia. Por situaciones fiscales y económicas insostenibles, las compañías Viva Air y Ultra Air cesaron sus operaciones, afectando a miles de pasajeros que tenían comprados sus tiquetes. Demasiadas personas perdieron sus viajes, estadías; otros esperaron por horas en un aeropuerto, a la espera de que una luz se asomara.
Es por ello que, tanto aerolíneas externas, como Avianca y Latam, han realizado gestiones de socorro para los pasajeros afectados. Además, el Gobierno también ha puesto su grano de arena para los viajeros. Tanto así que el presidente Gustavo Petro efectuó un Puesto de Mando Unificado (PMU) para atender la emergencia. Con corte a 3 de abril de 2023, los pasajeros que han recibido ayuda fueron 128.224.
Entre las ayudas ofrecidas, se destacan las proporcionadas a los viajeros de San Andrés, tanto de ida como de regreso. El 30 de marzo, Petro suspendió sus viajes para proporcionarle a la ciudadanía el avión presidencial, el cual permitió movilizarlos a sus destinos. Además, ordenó que todos los aviones de la Fuerza Aérea Colombiana fueran dispuestos para los usuarios afectados.