La portada de la revista SEMANA develó uno de los mayores misterios de los últimos meses en el país: la muerte de Seuxis Pausias Hernández, alias Jesús Santrich, uno de los objetivos más importantes de las autoridades en Colombia.

Aunque la propia SEMANA, en mayo de este año, había confirmado la baja del subversivo en Venezuela, donde el excomandante se escondía de la justicia de este país, faltaba una prueba que confirmara su deceso. Incluso el gobierno de Estados Unidos no daba por muerto a Santrich hasta no obtener al menos una fotografía que confirmara la noticia.

Y justo SEMANA reveló este sábado en exclusiva la imagen: se trata de una fotografía tomada minutos después de que Santrich pereciera a manos de un comando armado enemigo, hasta el momento, no establecido, aunque no se descarta que detrás estén las disidencias de Gentil Duarte, con las que Seuxis Pausias e Iván Márquez libraban una fuerte batalla por las rutas del narcotráfico.

En la imagen, Santrich se ve con los brazos arriba, vestido con un uniforme militar, aparentemente nuevo, bufanda verde, y con una herida que a simple vista pareciera en su cabeza. Se puede reconocer fácilmente con su particular bigote y sin sus tradicionales gafas oscuras, que siempre han puesto a dudar a los colombianos sobre su supuesta ceguera.

Aunque el rostro del fallecido es el de Jesús Santrich, lectores de SEMANA en las redes sociales encontraron otro detalle que reconfirma la veracidad de la fotografía: la cicatriz que tenía el excomandante de las Farc en el mentón y que va desde unos centímetros debajo de su labio hasta casi finalizada su barbilla.

La cicatriz en la barbilla de Jesús Santrich | Foto: NO

Al comparar las dos fotografías, nuestros seguidores confirmaron que es evidente que se trata del mismo hombre y que tras su muerte se puso punto final a la vida de un exguerrillero que tuvo todas las garantías para acogerse al proceso de paz ─como lo hicieron sus demás compañeros─, pero prefirió retomar de nuevo al narcotráfico, burlarse de los colombianos, de la fuerza pública, de la Corte Suprema y huir hacia Venezuela, desde donde amenazó a la prensa y hasta el propio presidente Iván Duque hasta encontrar su muerte.