El pronóstico de salud del ingeniero Rodolfo Hernández no es el mejor. Esta semana completó dos meses en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Internacional de Colombia, en el área metropolitana de Bucaramanga, luchando por su vida. SEMANA conoció que el excandidato presidencial permanece intubado sin mayor movilidad. En los últimos días, su familia pidió donación de plaquetas y mucha oración. Su esposa, Socorro Oliveros, los hijos y el director de la Liga de Gobernantes, Camilo Larios, son quienes más lo visitan.