El presidente Gustavo Petro llegó con tantas expectativas al poder que le ha resultado difícil complacer a todos los que lo acompañaron en la campaña para llegar a la Casa de Nariño.

El más reciente en pronunciarse fue el abogado Daniel Mendoza Leal, creador de la serie ‘Matarife’, quien reveló que se está quedando sin opciones laborales.

“Quizás es que soy un inútil. No sirvo para nada más que para luchar por mi país. Aquí no puedo litigar y el periodismo no me da para vivir, no me veo de actor ni metido entre las luces de la farándula”, apuntó Mendoza.

Y luego sentenció: “Después de la elección me quedé desempleado”, en un mensaje en el que etiquetó a los senadores por el Pacto Histórico Iván Cepeda y Gustavo Bolívar.

Pero no ha sido el único de este sector que ha sido crítico desde que Petro ganó la Presidencia. Otro de los que ha enviado mensajes es el abogado Augusto Ocampo, fiel defensor del petrismo y exfuncionario de Petro en la Alcaldía de Bogotá.

“Dialogan con aquellos que históricamente los han atacado, y eso está bien; pero por lo menos respóndanle el celular o los mensajes a quienes se tostaron la cara con el sol haciendo campaña (…) La realidad de que a muchos el poder los encumbra, no tiene partido, ni sexo ni color”, dijo Ocampo, molesto, cuando Petro se sentó a dialogar con líderes como el expresidente Uribe y el exvicepresidente Germán Vargas Lleras.

David Rozo, activista, defensor de la vida y quien se hace llamar Don Izquierdo, en Twitter, también en su momento mostró desilusión. “Lo voy a decir claro y sin miedos: ahora los ‘nadies’ no somos tan importantes. Solidaridad contigo, Augusto Ocampo. Muchísimos somos testigos de tu trabajo durante muchos años. Eso me pone triste y no voy a ocultarlo”.

El exasesor de Petro en el Congreso, Andrés Charry, que lo ha acompañado en varias batallas políticas y que estuvo en su alcaldía de Bogotá, reclamó porque las ideas del progresismo que los llevaron al poder se han visto sepultadas, especialmente por personas a quien consideran externas.