Aunque en varias ciudades del país la seguridad es uno de los temas que más preocupa a los colombianos, en Sincelejo la situación es diferente por cuenta del trabajo que viene haciendo la fuerza pública en los últimos meses.
Según cifras de la Policía Nacional, todos los índices delictivos han disminuido y eso se ha logrado por la cooperación ciudadana y el trabajo articulado del Ejército, la Armada, la Policía y la Fiscalía.
Por esa razón, el alcalde de Sincelejo, Yahir Acuña, presentó una nueva estrategia de seguridad que se aplicará en todos los barrios de la capital de Sucre. El mandatario local estuvo acompañado de la fuerza pública instalando botones de pánico, alarmas y cámaras comunitarias, sobre todo, en el sector comercial de la ciudad.
De esa manera, se busca que la ciudadanía siga alertando a las autoridades para capturar a quienes delinquen en la ciudad y seguir reduciendo las cifras delictivas. “Estos dispositivos son herramientas clave para la rápida atención de emergencias y la disuasión de hechos delictivos. Queremos que los sincelejanos se sientan más protegidos y que el comercio, un sector vital de nuestra economía, opere con mayor confianza”, dijo Acuña.
La nueva estrategia está encaminada a reducir al máximo los delitos que se presentan contra los comerciantes. “Estamos enfocados en desarticular todas las bandas criminales como el Clan del Golfo, Norteños, Rastrojos Costeños, Oficina de Envigado o cualquiera otra, y respaldamos la institucionalidad para, entre todos, enfrentar estos fenómenos criminales”, reiteró.
El denominado bloque de búsqueda multicrimen que opera en Sincelejo y del que hace parte la fuerza pública, ha logrado la captura de varios cabecillas de estos grupos criminales en los últimos meses.
“Es fundamental que la ciudadanía sea parte activa de este proceso. La seguridad no es solo responsabilidad de las autoridades, sino de todos los sincelejanos. Por eso, hacemos un llamado para que los ciudadanos usen correctamente estos dispositivos y reporten cualquier situación sospechosa”, finalizó.
Estas estrategias van acompañadas de operativos que buscan golpear a todas las estructuras al margen de la ley y en sus rentas criminales como la extorsión, el microtráfico, el sicariato, entre otras. Así mismo se siguen implementando programas sociales que persiguen como objetivo principal dar opciones a la población más vulnerable para que puedan construir un proyecto de vida dentro del Estado social de derecho.
Este modelo de seguridad ha sido presentado en otras ciudades del país y la fuerza pública intenta implementarlo en otras regiones para combatir a los criminales.