Más allá de las polémicas por una circular sobre personas trans que hacía referencia a menores de edad y sus videos de TikTok bailando, el superintendente de Salud, Luis Carlos Leal, salió de esa entidad por razones de más peso. El alto funcionario se volvió incómodo en la Casa de Nariño por las decisiones que estaba tomando y las investigaciones que adelantaba, entre ellas a Audifarma, así como a Mario Andrés Urán, un lobista cercano al Gobierno, al igual que por las intervenciones a Sanitas y Sura. Esta última, por no haber aceptado la solicitud de retiro de la EPS del sistema. Leal tuvo diferencias con Laura Sarabia, el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, y hasta con el mismo Petro.