El régimen de Nicolás Maduro inhabilitó a María Corina Machado, la candidata opositora a la Presidencia de Venezuela con más fuerza, por 15 años. Gustavo Bolívar, exsenador y defensor del gobierno colombiano, aseguró que se trata de una “jugada” que no se puede validar con silencio e incluso dijo que es lo mismo que ocurrió cuando Gustavo Petro, como alcalde de Bogotá, fue destituido e inhabilitado por la Procuraduría de Alejandro Ordóñez.

En ese caso, la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitió un fallo que sirve como rasero para situaciones similares en la región. La principal premisa radica en que ninguna autoridad administrativa puede quitarle derechos políticos a una persona.

Petro, fiel a su causa, rechazó lo ocurrido en su cuenta de Twitter: “Es claro que ninguna autoridad administrativa debe quitar derechos políticos a ningún ciudadano(a)”.

Sin embargo, mientras el presidente condenaba la inhabilidad de Machado, el canciller Álvaro Leyva se acercaba aún más al régimen que pretende quitarle los derechos políticos a la candidata presidencial. Este viernes, el ministro se reunió con su homólogo venezolano, Yvan Gil, para instalar una comisión de “vecindad e integración” entre ambos países.

“Hoy regresamos a la buena vecindad, a la integración. Dejar atrás ese error”, dijo Leyva en el evento, mientras Gil aseguró que se trata de “una cooperación diaria en las fronteras y más allá”.