El expresidente norteamericano no logra sacudirse del escándalo de Monica Lewinsky. Y 23 años después de que casi lo tumba, vuelve a caerle esa acusación con más fuerza que nunca. Está a punto de salir una serie de televisión sobre ese affaire producida por la propia Monica. Y como ahora existen las nuevas reglas del juego del Me Too, que no existían en los años noventa, esa venganza llegará con rayos y centellas. Lo interesante es que el actor que hace el papel de Clinton es Clive Owen, con el pelo teñido de blanco.