La relación entre la ministra de Vivienda, Catalina Velasco, con el gremio de los constructores es cada vez más distante. El último desplante fue durante una conversación con periodistas convocada por el Ministerio, que prometía tener como invitados a expertos del sector “de la construcción, banca y vivienda”.
Camacol, presidido por Guillermo Herrera, nunca recibió una invitación. Cuando le preguntaron a Velasco sobre las diferencias entre sus cifras y las del principal gremio del sector, ella se limitó a sonreír y decir que “las miradas son diferentes”, reiterando que, para ella, la conversación fue “amplia”.
La jefe de la cartera no solo no reconoce del todo que el sector se encuentra en crisis, sino que se refirió de forma destemplada a una problemática que ha sido un viacrucis para familias que han tenido que desistir en medio de la compra de su vivienda por falta de subsidios.
En noviembre del año pasado, en un evento, Herrera expuso la caída de la construcción y la comercialización de vivienda en el país. La respuesta de Velasco fue sorprendente: “Quiero... Es hasta chistoso, pero parafrasear a Bukele. Dilo sin llorar. Porque es que hay que mirar adelante, hay que pensar positivo y hay que dejar el apocalipsis”.
Y el líder de Camacol le respondió: “Recogiendo un poquito lo que dice nuestra querida ministra, este es el panorama del sector vivienda en Colombia. 16 meses, ministra, han pasado 16 meses de caídas. Hay anuncios muy importantes, pero aquí los que lloran son los hogares que se están quedando sin vivienda. Hay un estudio bien simpático que hizo la Galería Inmobiliaria, que es una empresa muy seria, por los 23.000 hogares que tuvieron que desistir a la compra de su vivienda social este año”.