El senador Gustavo Bolívar se refirió este miércoles a la renuncia de 23 oficiales de la Policía desde los rangos de coroneles hacia abajo, noticia que fue dada a conocer en las últimas horas.
A través de Twitter, el congresista calificó como “show” la información sobre la salida de los oficiales y aseguró que sus renuncias no se produjeron este miércoles. “Ellos pidieron la baja entre los meses de junio y julio, mucho antes de la posesión del presidente Petro”, subrayó.
En su mensaje, Bolívar compartió un comunicado de la Policía Nacional en el que se señala que el pasado 23 de septiembre se expidió una resolución firmada por el ministro de Defensa, Iván Velásquez, en la que se hace referencia al retiro activo “por solicitud propia” de 10 tenientes coroneles, un mayor, tres capitanes, siete tenientes y subintendentes de la institución.
“La institución precisa que las solicitudes por parte de los oficiales fueron radicadas desde hace varios meses de la siguiente manera: 11 en el pasado mes de junio, siete en julio y cinco en la primera semana de agosto, en el marco del procedimiento normal dentro de la Policía en el que los integrantes de la institución deciden poner fin a su servicio por razón propia, por razones individuales y familiares”, agrega el texto.
En el comunicado, finalmente, se afirma que debido a las fechas de radicación de las solicitudes de los 23 agentes “no es cierto que el retiro de estos oficiales se haya producido por una desmotivación ocasionada por decisiones institucionales recientes”.
Con la salida de estos 23 uniformados, son ya más de 40 oficiales de la Policía que han salido desde la llegada de Gustavo Petro a la Casa de Nariño. El primer remezón fue con el cambio de la cúpula militar y de Policía. Para el caso de la Policía, fueron más de 20 los generales que salieron de la institución.
Para quienes formaron parte de la institución, como el general Juan Carlos Buitrago, con dicha decisión se desarticuló la inteligencia de la Policía, pues aseguró que con la salida de los más de 20 generales se acaba con toda una generación de uniformados que se habían formado en la inteligencia, que eran expertos en combatir al crimen organizado, como lo han sido las Farc, los carteles de Medellín y de Cali, las disidencias de las Farc y los nuevos fenómenos de criminalidad del país.