El presidente de Bolivia, Luis Arce, decidió no asistir a la COP16 en Cali, a pesar de que su participación en la cumbre ambiental había sido confirmada recientemente por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia. Las razones detrás de esta decisión incluyen la crisis política que atraviesa Bolivia y el reciente atentado contra su antiguo aliado, el expresidente Evo Morales.

En representación de Bolivia, el vicepresidente David Choquehuanca asistió al evento y ya se reunió con el presidente Gustavo Petro y el canciller Luis Gilberto Murillo, en la tarde de este lunes, 28 de octubre.

“El presidente colombiano exploró posibles colaboraciones para combatir el aumento de los cultivos de hoja de coca. Ambas partes discutieron la necesidad de enfocar los esfuerzos en transformar estos cultivos hacia economías lícitas, mediante un trabajo conjunto que permita la producción y comercialización de productos alternativos, con el fin de reducir el impacto del narcotráfico en la región”, dijo la Presidencia.

Arce, por su parte, se encontraba en Rusia desde el 23 de octubre, participando en la cumbre de los BRICS, un grupo que reúne a economías emergentes como alternativa al G7. Se esperaba que, al concluir su agenda en Moscú, viajara directamente a Cali en el avión presidencial.

Sin embargo, en las últimas horas, Arce optó por regresar a su país para atender la situación de Morales, quien busca un lugar en las próximas elecciones presidenciales de 2025 y aspira a recuperar el poder después de seis años.

Esta ausencia de Arce representa otro revés para el presidente Gustavo Petro, especialmente considerando que otros líderes que comparten su visión política, como el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, también han confirmado que no asistirán. Lula se vio obligado a cancelar su viaje a la COP16 debido a un accidente doméstico que le causó una lesión en la cabeza, recomendándole los médicos que no viajara.