El futbolista e ídolo nacional Freddy Rincón falleció el 13 de abril de 2022, en medio de un aparatoso accidente que involucró a la camioneta en la que se movilizaba y a un alimentador del MÍO, sistema de transporte masivo que sirve a la ciudad de Cali.
Ahora, dos años después de su muerte, su familia busca que la empresa a la que pertenecía el bus que protagonizó el fatídico suceso le dé una indemnización, y argumenta que de no ser por el exceso de velocidad con el que se movilizaba ese automotor, no se habría producido el fallecimiento de uno de los mejores jugadores en la historia del fútbol colombiano.
Para los allegados del nacido en Buenaventura un 14 de agosto de 1966, es claro que la causa principal de la muerte de Rincón fue el exceso de velocidad del alimentador del MÍO, por lo que esperan que el proceso judicial termine a su favor.
“La familia de Freddy debe ser indemnizada porque tenemos, en alta grado de probabilidad, que el conductor del bus iba a una velocidad superior a 60 kilómetros por hora y eso fue una intersección donde debían ser máximo 30 kilómetros por hora”, dijo al medio 90 Minutos el abogado que defiende los intereses de la familia del jugador.
Según recalcó el abogado, desde la familia de Rincón consideran que si el alimentador no hubiese sobrepasado los límites de velocidad, el jugador no habría muerto en el accidente.
Cabe señalar que el informe del accidente indica que la camioneta se habría pasado un semáforo en rojo; sin embargo, el defensor no tocó el tema.
“Supuestamente, se pasó el semáforo en rojo, si el conductor del bus hubiese ido a 30 km, es claro, obvio y lógico que el señor Freddy Rincón no hubiese fallecido. Por lo tanto, la causa eficiente de la muerte de Freddy no fue ningún semáforo. Sino que fue la velocidad del bus”, agregó el defensor.
La audiencia en la que se definirá si la familia de Rincón recibe una indemnización se desarrollará este 27 de junio, frente al juez octavo civil del circuito de Cali.