El presidente Gustavo Petro llegó el Ejecutivo con la bandera de alcanzar la ‘paz total’ en un país que fue azotado por la violencia y el conflicto armado por más de 50 años.

Es así como en su afán de conseguir esa anhelada paz, ha optado por darles cabida en la vida social a decenas de personas que, por mucho tiempo fueron actores armados activos. En ese camino es posible encontrar los diálogos con el ELN, y muchos indultos a miembros de la primera línea, así como a exparamilitares y miembros de las extintas Farc.

Ante esto, fuentes del Departamento de Justicia de Estados Unidos le confirmaron a SEMANA que respaldan la posición del fiscal general, Francisco Barbosa, al negar la suspensión de órdenes de captura 16 peligrosos criminales, como lo pidió el presidente Petro.

Paralelamente, la senadora opositora al Gobierno nacional, María Fernanda Cabal, afirmó que “solamente un psicópata cree que liberar delincuentes hará algún bien a la sociedad”.

Por ahora se está a la espera de cómo transcurran las demás medidas con los diversos actores del conflicto, pues muchos permanecen detenidos.