Este lunes, el municipio de Puerto Boyacá recibió oficialmente las instalaciones de la nueva sede de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia – UPTC, un centro educativo de carácter público que se descentraliza para llegar a los rincones más alejados del departamento de Boyacá.
De esta manera, el municipio empieza a dejar de lado el legado de violencia al haber sido durante la época más aguda del conflicto territorio de operaciones de la Autodefensa Campesina del Magdalena Medio, un sanguinario grupo paramilitar al mando de Gonzalo y Henry Pérez.
Las instalaciones fueron inauguradas directamente por el gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán, quien resaltó el compromiso de las últimas administraciones para cumplir con esta promesa.
“Con inmensa alegría regreso hoy a esta tierra de gente amable, luchadora y perseverante para cumplirles con uno de los compromisos más sentidos y valiosos de nuestro gobierno, abrir las puertas de la universidad pública del departamento en Puerto Boyacá. La UPTC en Puerto Boyacá no solo representa el poder del conocimiento, sino también el compromiso de nuestra región en preservar y celebrar la vida en todas sus formas”, expresó el mandatario de los boyacenses.
Fueron cerca de $12.934 millones de pesos los que se invirtieron en este proyecto educativo, el cual inició en el gobierno de Carlos Amaya y culminó en el mandato del Gobernador Ramiro Barragán, una obra que sin duda contribuye a impulsar el crecimiento y desarrollo de la región.
La obra consta de un aula múltiple de 126,92 metros cuadrados ubicada en el primer nivel, la cual cuenta con tarima, aire acondicionado, techo, permitiendo un aforo de 72 espectadores. De igual forma, en este nivel habrá una sala para clases magistrales dotada de medios audiovisuales, aire acondicionado, conectividad y computadores.
En el segundo nivel se encuentra la cocina y el comedor con ventilación y la biblioteca con un espacio de 134.65 metros cuadrados acondicionada con aire. En el bloque 3 y 4, estará las áreas administrativas, baños privados, salas de profesores y aulas de estudio convencionales, además de los espacios complementarios que incluye baterías sanitarias, incluyendo para personas con movilidad reducida y zonas comunes.