Mucho se ha dicho sobre el nombramiento de Baracaldo. La polémica a su alrededor hizo que la opinión pública tuviera en cuenta quién es. Ahora, que esa primera tormenta pasó, fuentes cercanas le aseguraron a SEMANA que los wayú, comunidad indígena con la que históricamente se han presentado relaciones difíciles de trabajo, están contentos con la directora.
Hay que recordar que se priorizó un equipo de trabajo para atender la situación de desnutrición en el departamento y que por lo menos tres veces un equipo del ICBF nacional, coordinados por Baraldo, ha estado en la zona.
Lo más reciente, es que esta vez desde La Guajira llegaron al Instituto, en Bogotá, dos líderes de la comunidad. Uno de ellos, Javier Rojas, considerado contradictor histórico del ICBF. Allí, frente a cámara, destacó el respaldo a la señora Baracaldo.
“Recuperar la confianza no ha sido fácil, pero estamos trabajando rápidamente con las autoridades llevando ese mensaje. Existe la confianza con la nueva dirección, en cabeza de la doctora Baracaldo y sabemos que vamos a avanzar para que la comunidad abra totalmente las puertas del territorio. Ese es el trabajo que nos corresponde”, dijo.
La segunda líder de comunidades wayú, que también vino hasta la dirección del ICBF, es Matilde López, vocera de los beneficiarios de la sentencia de la corte constitucional T-302. Ella también destacado los avances en la relación.
“Nos hemos reunido con la doctora Baracaldo. Seguimos en el diálogo a raíz de la llegada del presidente de la República. Hemos avanzado en algunas cosas, continuamos en el diálogo. Creemos que las cosas van por buen camino”, expresó.
Por ahora, justo este 4 de febrero, Concepción Baracaldo cumple 144 días como directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. Días que han estado marcados por visitas a zonas de alta vulnerabilidad, renuncias, nombramientos y anuncios en materia de inversión y programas.