Rodolfo Hernández, exalcalde de Bucaramanga, fue condenado este jueves por su responsabilidad en el delito de interés indebido en la celebración de contratos, por hechos ocurridos en el 2016, cuando el acuerdo que buscaba solucionar la grave emergencia por el relleno sanitario El Carrasco, ubicado en las periferias de la capital santandereana, fue direccionado para beneficiar al ingeniero Jorge Hernán Alarcón Ayala.
En medio de la audiencia, el excandidato presidencial rompió su silencio para reafirmar su inocencia y, además, también reveló que tiene cáncer terminal, pese a los diferentes procedimientos y tratamientos a los que se ha sometido durante los últimos meses.
“Mi alma está limpia. Mi corazón, en paz. No estoy obligado a probar lo imposible, lo que nunca sucedió. Atendieron mi llamado para que el médico me atendiera, tengo cáncer terminal, gracias por dejarme ir donde el juez; de todo lo que pensaba, lo menos era estar procesado por cosas que no hice. Gracias, señor juez”, manifestó entre lágrimas.
Horas después de conocer el fallo, Hernández se refirió a la decisión y, a través de un mensaje en su cuenta de X, antes Twitter, reafirmó que nunca cometió ningún delito.
“Respeto la decisión de la justicia en primera instancia. Tengo mi conciencia tranquila y mi corazón en paz”, escribió.
El exmandatario aseguró que nunca ha robado dinero público, sino que siempre ha luchado y estado en contra de la corrupción, una de sus banderas principales cuando fue candidato a la Presidencia de la República.
“Nunca me robé ni un solo peso de la Alcaldía, al contrario, todas estas batallas las di por evitar costos a la ciudadanía. Seguiré en la lucha por la vida y la justicia”, agregó.