Al ingeniero santandereano Rodolfo Hernández se le empezó a desbaratar el equipo de 13 jóvenes estrategas que fueron exitosos en el manejo de las comunicaciones de la campaña.
La cabeza principal, Luisa Olejua, no lo acompañará en la UTL del Congreso, pese a que el excandidato presidencial le ofreció que trabajara a su lado desde el Senado en Bogotá y Bucaramanga.
El trabajo de Olejua en redes sociales fue tan exitoso que, mientras Hernández decidía qué camino tomar después de la derrota presidencial, la publicista recibió ofertas de trabajo de políticos regionales y hasta de una campaña presidencial en Centroamérica, que terminó aceptando.
En adelante, las comunicaciones de Rodolfo Hernández las manejará Esneider Robles, un joven que se formó en la campaña y que fue parte de la estrategia de redes.
La relación entre Hernández y Olejua quedó en los mejores términos y no descartan volverse a encontrar en el futuro.
Para Hernández, la pérdida es grande porque para él las comunicaciones han sido el éxito de su carrera pública. Actualmente, tampoco lo acompaña el argentino Ángel Beccassino, quien lo asesoró en la campaña. Tampoco Hugo Vásquez y Guillermo Meque, dos de sus más cercanos estrategas, quienes le renunciaron para salir del país.