El Gobierno tiene los días contados para sacar adelante la reforma pensional que está pendiente solo de su cuarto y último debate en la Cámara de Representantes.
Desde este martes, al proyecto de ley le quedan apenas tres semanas de la legislatura para ser aprobado y el articulado no quedó priorizado entre los primeros puntos del orden de la plenaria.
La reforma pensional fue agendada en el punto diez del orden del día para este martes 4 de junio, dejando la discusión de ese texto detrás del debate de otros nueve articulados y conciliaciones legislativas que también están en trámite en el Congreso.
“Esperamos puedan avanzarse se manera rápida para que alcancemos a iniciar el debate hoy. Esperamos que el ambiente de concertación se mantenga y así hemos seguido impulsando diálogos, mesas de trabajo, para que esta reforma siga avanzando en el Congreso de la República de cara a su último debate”, reclamó la representante Martha Alfonso, ponente del articulado.
El articulado hace parte del paquete de reformas sociales del presidente Gustavo Petro y es el proyecto que tiene más aire político en el Legislativo, pues la reforma laboral no va ni a la mitad de su trámite legislativo y la ley estatutaria de educación se ha visto aplazada por la falta de cuórum para debatirla.
Si la reforma pensional no es aprobada en cuarto debate para antes del 20 de junio, ese texto se hunde y tendría que iniciar nuevamente su trámite legislativo.
Ante ese riesgo, al Gobierno le quedan dos caminos: intentar mover el orden del día de las sesiones en las que el proyecto no sea priorizado o llamar a sesiones extras en el Congreso.