La Fiscalía busca por cielo y tierra el libro de visitas de un edificio donde Emilio Tapia, capturado por el escándalo del MinTIC y Centros Poblados, sostenía sus reuniones en Bogotá. Misteriosamente, el registro del segundo semestre del año pasado no aparece. Hay que recordar que en diciembre de 2020 se adjudicó el polémico contrato para llevarles internet a los niños más humildes del país. Por ahora se están tirando la pelota la empresa encargada de la seguridad y la administración. Tampoco han querido entregar los videos de las cámaras de seguridad. ¿Será que hay muchas visitas por esconder?