Óscar Lara Villarreal duerme tranquilo desde hace seis años. Las ventas de Colchones & Muebles Relax, la compañía que creó cuando tenía 23 años, le dan muchas razones para soñar. Hoy los números de su empresa son positivos y son el resultado de un gran esfuerzo. Este negocio ha sido una prueba de perseverancia. En 2011 un incendio consumió por completo la planta. Dos décadas de trabajo quedaron calcinadas. Pero Óscar vio el incidente como una nueva oportunidad de crecimiento. Con nostalgia recuerda que en 1991 invirtió 5 millones de pesos en el pago del arriendo de una casa y en la compra de los primeros insumos. El tiempo le ha demostrado que ese primer riesgo valió la pena: el año pasado la compañía barranquillera facturó más de 36.000 millones de pesos. Esa casa donde comenzaron sus operaciones se transformó en una gran fábrica de 12.000 metros cuadrados –en diciembre de este año tendrá 4.400 más–. Desde allí, 197 colaboradores, 53 de ellos en planta, hacen que este momento sea posible. Hoy, la compañía, más que producir colchones, tiene, además, una gran fábrica de más de 8.500 metros cuadrados, en la que produce reclinables, sofacamas y muebles funcionales pensados en el descanso y diversión de la familia. Lea también: Nueve jonrones barranquilleros Así, Colchones & Muebles Relax demuestra que la industria del confort sí es rentable, mientras les ofrece a sus clientes un mejor descanso al mejor precio. La empresa pasó de vender láminas de espuma de un centímetro a producir colchonetas y diseñar los primeros colchones, que se distribuyeron en el barrio El Recreo, a proyectarse hacia mercados internacionales. La Región Caribe será la puerta de salida de las primeras exportaciones de la compañía. En el mercado local la marca continúa con la consolidación de la oferta en departamentos de la región como Atlántico, Magdalena, Bolívar, Cesar y Córdoba; y planea abrir más puntos de venta en Santander, Norte de Santander y Antioquia. En las instalaciones de la empresa en Barranquilla se producen a diario 1.000 unidades de colchones. Desde allí se fabrican, distribuyen y comercializan otros productos para el descanso y confort de todos los colombianos: muebles y sillas reclinables son algunas de las opciones de su catálogo. “Saber que nuestros clientes disfrutan de productos que les generan bienestar nos da una enorme satisfacción. Pero aún más gratificante es tener este proyecto familiar, ver este crecimiento que ni yo mismo esperaba; y generar empleo de calidad y apoyar otros emprendimientos”, cuenta Óscar. Con todo lo conseguido es apenas evidente que duerma muy tranquilo cada noche, en uno de esos colchones especiales inventados por él.