Colombia tiene el reto mayúsculo de garantizar una explotación minera libre de mercurio. Y en esta tarea el papel de Antioquia es protagónico por ser el mayor productor de oro del país y, según la Asociación Colombiana de Minería, tener cerca del 78 por ciento de la extracción no autorizada de este mineral en su territorio, la cual usa, en su mayoría, mercurio para separarlo de la tierra.El primer paso para cumplir con este propósito en el país y en el departamento es la formalización de los mineros, y esta es la apuesta de la Gobernación de Antioquia. La Secretaría de Minas del departamento tiene a cargo esa misión y ha desarrollado varias estrategias para facilitar e impulsar este proceso con mineros tradicionales y pequeños. ¿Cómo lo realiza? Inicialmente esta hace presencia en los territorios, cultiva la confianza y establece un diálogo con las comunidades para dar a conocer los beneficios de la formalización. Con ese fin la institución pública ha realizado foros de minería, exposiciones de las ventajas de las unidades mineras que optan por el lado formal y una feria subregional de tecnologías limpias en el municipio de Segovia.En las subregiones de occidente, norte, Bajo Cauca, nordeste, suroeste, Valle de Aburrá y Magdalena Medio de Antioquia, la secretaría ha creado escenarios para los mineros que aspiran a un subcontrato de formalización minera o cualquier otro instrumento que permita la continuidad de sus labores extractivas bajo el amparo de un título. En estos encuentros se habla de los instrumentos de regularización, de los problemas sociales que conlleva la extracción informal y de las posibilidades de reconversión laboral en caso de no ser viable la formalización.La entidad ha logrado, en los últimos cinco años, radicar 146 solicitudes de subcontratos de formalización. De estos, 30 se encuentran inscritos, ocho en proceso de inscripción, 55 en trámite y 53 fueron archivados luego de las evaluaciones técnicas y jurídicas. El 94 por ciento de estos subcontratos fueron presentados para explotar metales preciosos, para lo cual utilizaban el mercurio en el procesamiento y disposición final del mineral. Hoy, luego de su formalización, han dejado esa sustancia o se encuentran en proceso de transición.A la fecha, Cáceres es el municipio que más procesos de formalización ha adelantado. Cuenta con 61 subcontratos radicados para este fin, de los cuales cuatro están inscritos, 27 se encuentran en trámite, cuatro en proceso de inscripción y 26 fueron archivados luego de los estudios previos. Los municipios de Remedios, Buriticá y Don Matías también han hecho lo propio con 15, 13 y 10 subcontratos de formalización radicados respectivamente.Otra de las estrategias va dirigida a los mineros tradicionales que bajo la vigencia de la Ley 1382 de 2010 (declarada inexequible por la Corte Constitucional) radicaron solicitud de formalización de minería tradicional para continuar con sus labores bajo el amparo de un título minero y así lograr un desarrollo de una minería sostenible, legal y responsable con el ambiente.Ante el dictamen de la Corte Constitucional se expidió el decreto 933 de 2013, sin embargo, este fue suspendido en 2016. Para entonces, se contaba con 347 solicitudes de legalización de minería tradicional en trámite en nueve subregiones del departamento: 88 en el nordeste, 54 en el suroeste y 50 en el Bajo Cauca, principalmente.Y con el fin de buscar soluciones, la Secretaría de Minas efectuó enlaces con el gobierno nacional y actualmente funciona un plan para la asesoría de solicitantes de legalizaciones de minería tradicional ubicadas en áreas libres.La formalización es indispensable para el desarrollo de una minería sin mercurio porque las unidades mineras se fortalecen técnicamente y tienen acompañamiento de las autoridades. No en vano el subcontrato de formalización minera fue contemplado en la Ley 1658 de 2013 que propende por un país libre de mercurio.