Más de 1.400 dispositivos electrónicos interconectados a más de 180 servidores, constantemente monitoreados, permiten que los 1.000 camiones diarios que ingresan a la Sociedad Portuaria Regional de Cartagena y a Contecar puedan cargar y descargar la mercancía en solo 30 minutos. Pero por encima de esta tecnología, la optimización de estos procesos ha sido posible gracias al talento humano del Puerto de Cartagena que ha adoptado en gran medida la cuarta revolución.? El proceso arranca muy temprano. A las siete de la mañana ya hay camiones listos para descargar los contenedores de exportación. Primero deben pasar por los portales de reconocimiento óptico de caracteres, en donde unas cámaras leen y automáticamente identifican el contenedor y la placa del camión. Entre tanto, otro equipo de detección de radiación determina la radioactividad de la carga. ?Luego se suben a la báscula y en un segundo un sistema calcula el perfil de riesgo del contenedor. Del resultado depende si son enviados o no al escáner de rayos X, posteriormente se les asigna una de las 34.000 posiciones de descarga, se establece la grúa que lo asistirá en el proceso y en un mensaje electrónico queda consignado la línea naviera que lo transportará. Lea también: Los limones colombianos que han seducido al mercado holandés ?El quiosco de autoservicio imprime un papelito a cada conductor para que sepa a dónde dirigir el camión. En el trayecto al sitio de descargue, el sistema del puerto verifica cada diez segundos que los vehículos no se salgan de su ruta. Las 73 grúas con las que cuenta el puerto y que reciben a los camiones están llenas de sensores que constantemente reportan sus condiciones al centro de control y mantenimiento. Una vez finaliza el proceso, las cámaras y sensores confirman que el vehículo está vacío y otro quiosco imprime el recibo del contenedor al conductor, que regresará en unas horas para comenzar de nuevo, en un ejercicio que tiene lugar 24/7.  *Director de Operaciones y Sistemas de la Organización Puerto de Cartagena.